24.9.13

Presa es anagrama de Pares.




Cómo no habría lugar para las otras cosas, PARA LOS CREDOS SEDIENTOS otras puntadas seguidas de náuticos planes, GORRIONES DERRETIDOS en la masacre de Chernóbil , un montón de apelaciones éticas, más pausas, silenciosos negros hoyos en la máscara, en los pliegues blandos del rostro una sátira, una ensalada de verdes de flancos de aberturas por las que se cuela el pie de un tercero, entrando a la casa diferente de todos, DIFERENTE DE SUS MANOS QUE TOMAN TODO el caudal de joyería creyendo una plastilina de posibilidades, casas veredas, sale a la calle con su rostro preciso y atareado, comprometido con la dureza. 

Si ahora estoy ocultando los colores del abismo no tendrá solución una postrada imagen, no tengo otra 
historia que contar que ésta, ni otra lámina de peces no tengo OTRO LUGAR otro deseo, es 
generosamente éste, el que se sacia con plástico.


UNA MÁS PARA LAS VIDRIERAS DE LA CALLE GIGANTESCA



Lánguidas, pestañas son ligeras como mediados de semana, como pólvora en el aire se disipan entre los breves cántaros que dan origen al firmamento.


Tu presencia es quebrarse.

2.5.12

Escuchar música de gente que ya murió.


Antes no me costaba, ahora siento algo raro.
Creo que me lo pegó A..
Creo que solamente es haberme desacostumbrado, como dije que iba a desacostumbrarme.
Quizás me analizo menos.
Me miro menos.
Me se menos, y me trago menos.
Me doy menos, y me presto menos.
Me salgo menos de los lugares que menos me gustan, y me golpeo menos.
Pero me aburro.
Y a veces no me doy cuenta.
Eso decía ella, no estás deprimida.
Estás distraída.
Y es así, estoy distraída.
Distraída con qué?
Con el amor que todo lo puede más que la sincera razón que me hace impotente.
Ese amor tan henchido de orgullo como de temor, y al acecho de uno como los mosquitos.
Mi amor es un mosquito, un oso panda y una cucaracha.
En fin mi cariño se hizo grande y mi voluntad no tiene lugar ahí.
Yo no tengo lugar en mi cariño, no con el peso que deja el sótano.

Despacio me acuerdo.
De mi.
Soy una forma que se dejó a la mitad (no se puede dejar una forma a la mitad).
Y tengo el revés en el cinto gracioso, alrededor de una trenza infinita y vaga.-
Vaga y celosa, como en pleno verano.
Asoma un parto que oscurece y calla mundos.
Un primer hijo se complace sobre arena salada,
y las primeras horas de la noche lloran como naciendo.


Siempre que me pierdo volver se hace largo, pesado, imposible.
Moribundo; simplemente no me dan ganas.
No hay caminos hacia atrás.
Ni lienzos nuevos, ni palancas ni persianas para el dormitorio
que se hace espeso
nuevamente. 

27.4.12

Sin título.


Y para que?
Se aparece como una especide de sombra, es un acompañamiento por completo antipático (va de suyo que la interpretación está jodida, siempre jodida y minusválida)
El dinero no es un rey, es un esbirro. Esa viscosidad que se conmueve al contacto de dos primates que se amaron; simplones primates amándose. Copulando en la hierba, usan preservativos que fueron tripas, yo quiero mis propias cópulas. Quiero calcinar cien mil cúpulas.
Qué sería de la inercia sin el móvil dinero? Sin el móvil pedante y aglutinante de gentes, qué haríamos todos los días en horario comercial?
Qué establece una partida de nacimiento?
El momento en el que uno se vuelve pasto; pasto para pisar.
Las personas poderosas no tienen partida de nacimiento, partir es para los ricos como llegar para los pobres, una especie de alivio espontaneo y efímero.
Me acordé con lo de efímero de tu cariño, y del mío, más efímero aún.
No tener cariño para darle a la gente, no tener ni coca cola, ni sanguchitos.
Si, quiero un poco de su carne señor bolsillo, vacíe sus ideas conmigo, hágale caso a la providencia que por algo no está en este momento, no en el acuerdo de las manos torpes. Soy un grupo, todo un sindicato de manos torpes.
Una aberración de manos que silban, caminan de noche esperando que las secuestren, torpes, malditas, torpes, malhechas, torpes, malnacidas, brutísimas.


Escribir es como dedicarse a dar opiniones estériles, uno escribe porque no va  a tener hijos, o porque va a matar a una esposa, o porque va a morir de sífilis.
Uno escribe porque no sabe qué otra cosa hacer, escribir es una causa de los ociosos. Uno que es ocioso espera que con el propio placer otros sientan cariño de obra, es una clase de tantas de mendigo, una clase de tantas de bronca; todos deberíamos ganar dinero por decir ninguna cosa.
Todos deberíamos perder dinero, sobretodo por la boca.
Por la boca deberíamos nacer, no morir, en cardumen.
Uno que escribe solo espera que lo lean placenteramente ( en el caso de algún enfermo,  la espera es otra, la espera es la consagración en un canon potable, como agua de canilla).
Uno que escribe solo piensa en uno mismo, y en que no tiene que comer, ni lo tendrá mañana.
Es extrañísima la ansiedad que experimenta mi cadaver de los años próximos. Tranquilidad concedida a la conciencia que no se hace cargo de su conciencia. No tener para comer.
No tener para comer.
No tener, ni comer, ni para.
Ni parar. 

3.4.12

Cansada.


Muchos bienes.
                                                                                                                              [Tengo.
Una sensación aletargada de cansancio, como si me debiera largas épocas de agosto.
Agotado, en el sueño que prescinde de placeres y abre la puerta a paisajes brahmánicos, caminan saldos de letanías molestas, risueños porvenires de dolor fresco, salmodian cantos relamiéndose entre mil sábanas para las frentes anchas.
Tu frente ancha ya no visita mi semblante, y hacia los parecidos de las caballerizas se dirigen por la tarde horribles cantos de sirena.
Son siempre la multitud en el sino de una promesa
Llevándose con el agua las humanas basuras y sus miserias.

Tengo la sensación del cansancio aletargado, en el sueño abre las puertas la gran orfebrería pisando brisas calmas
Ofrece la virtud un lugar para la pesca, de resfriados y excusas
Durante una larga espera.

Caminan lejos sembrándose nubes
Lloverán hacia el costado de tu cuadra más ajena,
Y encontrarán la satisfacción garantida, el suplicio de mujeres que han sido olvidadas con los años,
Mientras las paredes nacen, más constantes, más frías más fraudulentas y carentes.
Sacan manos hacia el cielo, salmodian pedazos de religiones lejanas,
Cantan a la bestia que les lleva la ventaja en la acechada luz
Por la cuadra más lejana de tu costado.

Y le llamamos trabajo. 

8.12.11

Poema parcialmente simétrico.



Liviano en las praderas.

Uno que escucha un paladar sonriente y amarillo, como el sol.
En un pueblo chiquito, de una escena, de un pais.
 Cayendo cada tanto en las mentiras del tiempo
En un pueblo chiquito, en una mesa, dentro de una caja de zapatos.

Me mandó cartas a los 64 años, me necesitó y me alimentó.
Todos nos hacemos viejos.
Podríamos hacernos compañía.

Invertebrada risa escapa de labios de manguera.
Sobre la práctica de un volar por debajo de las palabras.
  O por el costado
Sobre la réplica de un salir hacia fuera de los montes.

Por siempre

12.9.11

[Los bordes no saben nada.




cuántas veces me habría caído sobre la
noche
después de simular por el techo de mi casa

mientras sigan conspirando para las acotaciones compuestas del grano que un pie gigantesco amenaza
que sale de las mantas las cobijas de los pendientes de la vida espejada
en los muros en las escaleras en los portales, en las galerías.
que se esparce por la siembra que es tu pelo
casi mas poblado que pradera
de minucias de gente que aspira a servirte de ejemplo
ALGUNA VEZ QUIZÁ LE HAYA CEDIDO EL ASIENTOen las palmas de la nube que nos cobija por la noche pierdo cada idea que decidió abandonarme
estoy en el siglo de las concordancias establecidas a corto plazo
las canciones de fábrica de preposiciones aquí
cuanta gente se ha parado a contemplar desde la tarde su balcón en el séptimo piso
en el simposio de cópulas beatificadas
entre el instinto de las muñecas
tensión de tensiones
cansancio de cansancio para siempre
por el decidido abandono en las galerías
mientras sigan conspirando para las acotaciones durante tu espalda
compuesta sin balcones ni ejemplos.
 

nos tocan espléndidos jarrones de    
            plástico
gigantes, pero los sábados cuando agarrás velocidad en el colectivo
esconden nuestra ropa que se junta con mas ropa
que se junta con la misma carne que en la desnudez rechazamos para
siempre 

15.7.11

Museo.

sorber la palidez de un camino sin escrúpulos que se cierne yuxtapuesto
entreteniéndonos para completar fisuras
ahora en su jadeo se cristalizan
se hacen montaña y obstrucción de rectos prometidos a caballerizas
a limítrofes ciudades que ríen brisa otoñal constante
despiertas en la insomne vela caucásica 
en la exuberancia de la exposición
que no mencionaré
para las manos presiden un envoltorio
de papel plástico y para las cabezas
para las estridencias de una conciencia que anochece
prometen el prefacio eterno.

                         [el mito es un reloj.

sobre que la carta entrega al portador de un halo dramático
al inquisidor de un silencio roto, al que comenta las praderas de un hombre detallando cada hoja cada     
sombra cada animal en la llanura espesa
como si hiciera falta la evocación para la presencia.